Ahora usted sabe que la palabra "Evangelio" significa "Buenas Nuevas." Pero, las "nuevas" deben tratar de algo que verdaderamente pasó. Por ejemplo, en cualquier periódico se informan muchos eventos. El informe no es el evento. De la misma manera, el Evangelio tiene que ver con una Persona especial y un Evento especial. El Nuevo Testamento es el informe inspirado de esta Persona y de su Evento.
Pablo, un apóstol de Cristo, nos dice que la Persona es Jesús. Cuando Pablo primero llega a la ciudad de Corinto, su único mensaje era "Jesucristo y a éste crucificado" (I de Corintios 2:2). Pablo claramente señala el Evento principal del Evangelio:
"Además os declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado, el cual también recibisteis, en el cual también perseveráis; por el cual asimismo, si retenéis la palabra que os he predicado, sois salvos, si no creísteis en vano. Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados conforme a las Escrituras, y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras" (I Corintios 15:1-4)
Note la importancia de creer que el evento es verdadero. "Por este Evangelio usted es salvo, si..." El "si" muestra que hay una condición. La condición es que uno debe continuar creyendo el mensaje del Evangelio. Los corintios no habían visto el evento del Evangelio. Sólo lo habían oído de un testigo ocular, Pablo. Por consiguiente tenían que continuar creyendo en la verdad e importancia de lo que habían oído. ¡Qué Cristo en verdad murió por nuestros pecados, como lo decían las mismas Escrituras! ¡Que Cristo verdaderamente había vuelto a la vida en el tercer día! (I Corintios 15:3-4) ¡Esas son Buenas Nuevas!
1. 
[1 Corintios 2:2] El mensaje de Pablo en Corinto era “Cristo Jesús y...”

Su iglesia

éste crucificado

su entorno
2. 
[1 Corintios 15:1-4] Pablo enseñó que Cristo murió por...

nuestros pecados

la mano de los romanos

la voluntad de Dios